EL EVANGELIO DEL DÍA: “NO SE INQUIETEN” (JN 14,1) LIBRO DE LOS HECHOS DE LOS APÓSTOLES 6,1-7. En aquellos días, como el número...
EL EVANGELIO DEL DÍA:
Entonces los Doce
convocaron a todos los discípulos y les dijeron: "No es justo que
descuidemos el ministerio de la Palabra de Dios para ocuparnos de servir las
mesas.
Es preferible,
hermanos, que busquen entre ustedes a siete hombres de buena fama, llenos del
Espíritu Santo y de sabiduría, y nosotros les encargaremos esta tarea.
De esa manera,
podremos dedicarnos a la oración y al ministerio de la Palabra".
La asamblea
aprobó esta propuesta y eligieron a Esteban, hombre lleno de fe y del Espíritu
Santo, a Felipe y a Prócoro, a Nicanor y a Timón, a Pármenas y a Nicolás,
prosélito de Antioquía.
Los presentaron a
los Apóstoles, y estos, después de orar, les impusieron las manos.
Así la Palabra de
Dios se extendía cada vez más, el número de discípulos aumentaba
considerablemente en Jerusalén y muchos sacerdotes abrazaban la fe.
SALMO 33(32),1-2.4-5.18-19.
Aclamen, justos, al Señor: es propio de los buenos alabarlo.
Alaben al Señor
con la cítara, toquen en su honor el arpa de diez cuerdas.
Porque la palabra del Señor es recta y él obra siempre con lealtad; él ama la justicia y el derecho, y la tierra está llena de su amor.
Los ojos del Señor están fijos sobre sus fieles, sobre los que esperan en su misericordia, para librar sus vidas de la muerte y sustentarlos en el tiempo de indigencia.
EPÍSTOLA I DE SAN PEDRO 2,4-9.
Queridos hermanos:
Al acercarse a
él, la piedra viva, rechazada por los hombres pero elegida y preciosa a los
ojos de Dios, también ustedes, a manera de piedras vivas, son edificados como
una casa espiritual, para ejercer un sacerdocio santo y ofrecer sacrificios
espirituales, agradables a Dios por Jesucristo.
Porque dice la
Escritura: Yo pongo en Sión una piedra angular, elegida y preciosa: el que
deposita su confianza en ella, no será confundido.
Por lo tanto, a
ustedes, los que creen, les corresponde el honor. En cambio, para los
incrédulos, la piedra que los constructores rechazaron ha llegado a ser la
piedra angular: piedra de tropiezo y roca de escándalo. Ellos tropiezan porque
no creen en la Palabra: esa es la suerte que les está reservada.
Ustedes, en
cambio, son una raza elegida, un sacerdocio real, una nación santa, un pueblo
adquirido para anunciar las maravillas de aquel que los llamó de las tinieblas
a su admirable luz.
EVANGELIO SEGÚN SAN JUAN 14,1-12.
Jesús dijo a sus discípulos:
"No se
inquieten. Crean en Dios y crean también en mí.
En la Casa de mi
Padre hay muchas habitaciones; si no fuera así, se lo habría dicho a ustedes.
Yo voy a prepararles un lugar.
Y cuando haya ido
y les haya preparado un lugar, volveré otra vez para llevarlos conmigo, a fin
de que donde yo esté, estén también ustedes.
Ya conocen el
camino del lugar adonde voy".
Tomás le dijo:
"Señor, no sabemos adónde vas. ¿Cómo vamos a conocer el camino?".
Jesús le
respondió: "Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida. Nadie va al Padre, sino
por mí."
Si ustedes me
conocen, conocerán también a mi Padre. Ya desde ahora lo conocen y lo han
visto".
Felipe le dijo:
"Señor, muéstranos al Padre y eso nos basta".
Jesús le
respondió: "Felipe, hace tanto tiempo que estoy con ustedes, ¿y todavía no
me conocen? El que me ha visto, ha visto al Padre. ¿Como dices: 'Muéstranos al
Padre'?
¿No crees que yo
estoy en el Padre y que el Padre está en mí? Las palabras que digo no son mías:
el Padre que habita en mí es el que hace las obras.
Créanme: yo estoy
en el Padre y el Padre está en mí. Créanlo, al menos, por las obras.
Les aseguro que
el que cree en mí hará también las obras que yo hago, y aún mayores, porque yo
me voy al Padre."
EXTRAÍDO DE LA BIBLIA: LIBRO DEL PUEBLO DE DIOS.
No hay comentarios
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.